Castelar festejó sus 43 años con baile, desfile y música.
Sin fecha de fundación, la Ciudad creció a la vera del tendido del ferrocarril Sarmiento. Si bien el primer tren se detuvo hace más de 100 años en el, por aquel entonces, Apeadero Kilómetro 22, recién en 1971 se reconoció al pueblo como ciudad al alcanzar el número necesario de habitantes.
Al llegar a los 43 años de edad de la ciudad, se realizaron varios festejos en la zona. Si bien el mal tiempo atentó contra algunos de ellos, se pudieron concretar en las calles céntricas.
Organizado por el Centro Comercial e Industrial de Castelar se realizó el desfile “Castelar es Moda” con prendas, zapatos, accesorios y atuendos en general brindados y creados por los comerciantes de la ciudad. El desfile estuvo planeado para realizarse en la calle Montes de Oca, pero el mal tiempo obligó a que la muestra se realice en el interior de la cámara de comercio sin que genere mayores problemas para las modelos y los organizadores. Se pudieron apreciar cortes y marcas vendidas en Castelar.
Paralelamente se realizó un desfile de autos antiguos que partió desde la Reserva Natural, ubicada en Coronel Arena y Prúdan, en Castelar Sur. El viaje se planificó para arribar al comienzo del desfile, pero la tormenta obligó a resguardar los vehículos que no obstante llegaron al punto final del paseo, en el Centro Comercial e Industrial, al final del desfile.
Se pudieron ver, fotografiar y apreciar vehículos clásicos y poco comunes como NSU Prinz, BMW Isetta 300, Fiat 500 y 600, entre otros. Los vecinos que se acercaron a los autos pudieron conocer a los pilotos y la historia de cada vehículo, muchos de los cuales han participado en circuitos de autos clásicos por todo el país y hasta en otras partes del mundo.
Cómo parte de los festejos el bar Tarzán, ubicado en Los Incas al 2300, realizó una milonga en la calle, con mesas, escenario y bailarines. El bar de la estación de Castelar es famoso por su imagen y por ser parte de la identidad de la ciudad. Todos los miércoles dedica su salón al tango y se realiza una milonga que convoca a vecinos y apasionados del dos por cuatro de toda la región. En esta ocasión, la milonga copó la calle Los Incas donde hubo baile y música en vivo hasta la madrugada.
Coincidiendo con los festejos de Castelar, la artista de Ituzaingó Graciela Mosches abrió su casa para realizar un festival a modo de cierre del año. La Casa Naranja, como se conoce a su domicilio y atelier, se llenó de amigos, conocidos y curiosos que pudieron apreciar sus cuadros y disfrutar de música en vivo de la mano de la orquesta de tango La Cuerda Curda y la agrupación de malambo Walofinna.
El Municipio por su parte realizó actividades para la familia en la intersección de William Morris y Casacuberta, en Castelar Sur, y el cierre de los festejos en la Plaza de los Inmigrantes, San Nicolás y Munilla, Castelar Norte, con una muestra de talleres de cultura y de educación vial.
Tras 43 años de historia cómo ciudad, los festejos y reuniones dejaron postales de baile, de desfiles, de paseos y actividades que muestran la identidad de Castelar y sus habitantes.
Redacción: Leandro Fernandez Vivas
Fotos: Gabriel Colonna, Leandro Fernandez Vivas y María Belén Chiesa