La Ciudad Autónoma de Buenos Aires premia año tras año a las figuras más destacadas del deporte. Se trata de 60 disciplinas en donde un jurado de notables elige a los deportistas que llevaron a lo más alto su desempeño. El vecino Juan Benítez Gallardo fue premiado por el deporte ecuestre, luego de dos años de competencias nacionales e internacionales que lo tuvieron siempre en el podio.

Jorge Newbery fue una figura destacada en todas las áreas en las que participó a principios del siglo pasado. Es considerado el primer ídolo popular de la Argentina, ya que fue pionero de la aviación también fue boxeador, ingeniero y funcionario de la Ciudad de Buenos Aires, la que toma su nombre para nombrar al premio que destaca año a año a los mejores deportistas del país.

 

“El Newbery es el premio con el que uno sueña de chico”

 

Entre las 60 disciplinas premiadas el 3 de diciembre de este año, una en particular tenía la atención de Castelar Digital ya que el vecino Juan Benítez Gallardo había sido seleccionado para integrar la terna por el Premio Jorge Newbery al Deporte Ecuestre. La Subsecretaría de Deportes de la Ciudad de Buenos Aires eligió la Usina del Arte como escenario para la entrega de premios y para vivir con nervios el paso de cada categoría. A mitad de jornada por los parlantes se escuchó el nombre de Juan Benítez Gallardo: “Estoy muy contento, muy feliz. Es un reconocimiento importantísimo para cualquier deportista”, señaló el vecino a este medio pocos minutos después de haber sido premiado, y continuó, “Los Newbery como los Olimpia son los premios con los que uno sueña de chico. Me tocó estar ternado entre dos grandes deportistas, pero iba con muchas expectativas, tuvimos un año muy bueno mi caballo y yo”.

A mediados de este año Juan Benítez Gallardo integró el equipo que representó a Argentina en los Juegos Panamericanos de Lima. En aquel momento el jinete contó todos sus secretos a Castelar Digital (Ver: Juan Benítez Gallardo: “vamos a buscar la medalla”) los que le dieron muy buenos resultados: “En estos dos últimos años de proceso deportivo, tuvimos una participación consecutiva en las selecciones del equipo argentino, lo mismo que la titularidad, me permitió formar parte de un equipo argentino ganador de una medalla de oro en el 2018, en el sudamericano que se hizo en Argentina. Haber logrado el subcampeonato nacional a fin de ese año colaboró para ser preseleccionado en marzo del 2019 para después ingresar al equipo definitivo que iba a representarnos en los Juegos Panamericanos de Lima. Volvimos a quedar en el equipo argentino, titulares, hicimos un papel excelso en el panamericano, cada vez que lo cuento me agarra escalofríos. Dimos todo y nos salió todo. Si bien no logramos la plaza olímpica por equipos, quedamos quintos, pero competimos con grandes equipos que trabajan en ligas mayores en Europa como Estados Unidos, Canadá y Brasil. Individual quedé treceavo de 50 participantes, lo que me consagró como el mejor argentino en ese panamericano. Y con una pequeña posibilidad de ganar una plaza olímpica. El domingo pasado competí internacionalmente y me fue bien, me faltaron puntos para conseguir la plaza olímpica, pero muy feliz igual, gané el Campeonato Nacional. Quedamos campeones, felices”.
 

“El domingo pasado gané el Campeonato Nacional”

 

Los últimos logros fueron el preludio para el Premio Newbery, aunque el momento exacto de la premiación, cuando los jueces dieron su nombre, sorprendió al deportista: “Me agarró de sorpresa, porque mi terna fue la 35 de 60 que hubo esa noche. Si bien por los resultados espectaculares de estos años fui a la terna con mucha confianza, mis compañeros también tenían excelentes resultados. Igualmente los Premios Newbery fueron incertidumbre, felicidad de estar, y nervios como si fuera a competir. Haber estado ahí ya era ganar, después si lograba el premio era un tema aparte”.
 

 

“para un deportista es el reconocimiento al esfuerzo, a seguir intentando”

 

“Cuando me nombraron exploté de felicidad, pero todavía no caigo. Tengo una emoción enorme, de hecho soy un tipo muy emotivo, pero no pude llorar. Estaba tan emocionado que quedé como que no bajo… ya me va a bajar la adrenalina! Lo disfruté mucho con mi mujer  y mi hija que me apoyan en esta carrera, este proceso deportivo. Tengo felicidad inmensa, inexplicable, para un deportista es el reconocimiento al esfuerzo, a la dedicación, a segur intentando. Hemos culminado un año hermoso, único, en mis años de deportista. Intentando disfrutarlo al máximo y que no se acabe”, finalizó el jinete.

Entrevista y redacción: Leandro Fernandez Vivas