El Club Deportivo Morón se despidió del estadio Francisco Urbano
El encuentro de la despedida fue discreto. Morón intentó ser protagonista, pero sin claridad y solo empujado por la gente que copó ambas cabeceras. Lezcano y Akerman intentaron, pero sus remates se fueron desviados. Las veces que el Gallo podía aproximarse al arco de Acassuso, Ruhl contenía los embates y se transformó lentamente en la figura. Sin hacer demasiado, el arquero Quemero fue el responsable de la ausencia de goles en la primera parte. El segundo tiempo mantuvo la misma tónica, aunque Acassuso se animó un poco más e inquietó a Migliardi en un par de ocasiones, aunque Chiche respondió bien. A los 21 minutos, Damián Gómez convirtió un golazo para arruinar la fiesta de Morón. Los dirigidos por Grana intentaron llegar al empate, pero nuevamente apareció Ruhl para consolidarse como figura del encuentro y mantener su arco en cero.
Antes que termine el encuentro, cientos de hinchas de Morón invadieron el campo de juego obligando al árbitro Lupani a dar por finalizado el partido. Mientras los jugadores de Acassuso escaparon rápidamente a los vestuarios, los de Morón debieron entregar su ropa a los invasores, tal como sucede en cada cierre de torneo. Minutos más tarde, los fuegos artificiales marcaron el cierre y la despedida final del Francisco Urbano.
Morón cierra una mala temporada. Con un equipo que apuntaba al ascenso, finalizó en la 17ª posición, mirando de reojo la tabla de promedios y sabiendo que, el año próximo estará obligado a realizar una campaña similar a la que hicieron quienes hoy están clasificados al Reducido, para no temer un descenso a la Primera C. Comenzará el período de renovación, llegadas y partidas de jugadores para ir en busca de un objetivo claro. Mientras se soñaba estrenar el nuevo estadio en el Nacional B, la realidad marca que será la sede de una lucha que buscará mantener al equipo en la Primera B.
Fuentes: www.oestehoy.com y www.clubdeportivomoron.com.ar