La expedición Atlantis, el Calendario Gregoriano con sombras en las pirámides mayas, la platería mapuche y las bandas de rock del oeste y su hermandad fueron algunos de los muchos temas por los que recorrió la charla y entrevista a Hernán ‘Budapest’ Marino, artista multifacético y vecino de Castelar.

Identificado por sus cuadros, su estética, formas y colores, Buda no puede encasillarse en el rubro de pintor o muralista. Buda es artista, curioso, investigador en cada disciplina que le llama la atención y además un gran narrador de sus historias y aventuras personales. Distendido desde su casa y respaldado por sus obras habló de todo en #CASTELARenVivo, el ciclo de entrevistas que lleva adelante Castelar Digital todos los jueves a las 22 en Instagram.

"Mis amigos me dicen que hay un verde Budapest. Pero soy fanático del verde cadmio, verde manzana, verde lima"

Puntillismo, Van Gogh, luz, la naturaleza como escenario y muchos colores, la obra de Marino tiene su firma en cada pincelada. Su impronta es ineludible y sus cuadros se identifican sin importar donde el espectador los encuentre: “Soy medio fanático de usar siempre los mismos colores, la misma combinación, mis amigos me dicen que hay un verde Budapest. Pero soy fanático del verde cadmio, verde manzana, verde lima, una cosa medio fluorescente, casi iridiscente, pero me encanta el blanco y negro también”, comenzó a explicar su técnica el vecino ante las preguntas del periodista Leandro Fernández Vivas para Castelar Digital.

Todos los jueves a las 22 en su perfil de Instagram Castelar Digital realiza #CASTELARenVivo, el ciclo de entrevistas que busca conocer a los artistas, emprendedores, comerciantes y vecinos amigos que hacen a la historia común de Castelar y el Oeste del Conurbano. El primero fue Iván Vázquez de Lemon Studio Inc, luego fue el turno del músico Hernán Sánchez, le siguieron Lucas D’ippolito quien lleva adelante el estudio de grabación Movarte, la cocinera vegana y columnista de este portal Mar Vegan, la actriz y cuentera Antonella Rocchi, el músico y luthier Pipo Nazaro, también Federico Rangone de veterinaria Rangone, El Rulo Rodante que unió Castelar con Cusco en bicicleta, Hierros Libertad la empresa familiar que brindó los materiales para la construcción del Plaza Oeste, Bonardi Propiedades, Ildo ‘Tano’ Baccega de Ella Es Tan Cargosa, la cervecería artesanal Birralama y ahora fue el turno de Hernán Budapest Marino.

"A veces pienso ‘¿Hasta dónde llegará el cuadro este? ¿Cómo se defenderá?’. Como quien libera un pájaro, a veces se van y no sé dónde están"

“En el arte siempre hay una posibilidad de trascender, dejar un mensaje para el futuro. Y la verdad que cuando uno pinta de algún modo sueña con que el cuadro no vaya a un tacho de basura, sino que quede en algún lugar y alguien lo guarde, lo atesore, lo regale de generación en generación, es un sueño que sueño despierto. A veces pienso ‘¿Hasta dónde llegará el cuadro este? ¿Cómo se defenderá?’. Como quien libera un pájaro, a veces se van y no sé dónde están, les perdí el rastro a un montón de cuadros”, señaló el artista.
 
Toda la obra y trayectoria de Buda se puede conocer en su espacio de artista en Castelar Digital. Todo representante del arte en el oeste del Conurbano puede tener su espacio en esta sección especialmente dedicada de Castelar Digital.
 
“Está bueno también largar los cuadros porque si no uno se transforma en coleccionista de uno mismo. Me cuesta poco soltar los cuadros, los vendo económicos, les pongo un precio accesible para que se vayan, para que vayan a hacer su laburo, para que los vea alguien más, quiero que se compartan. No me quiero quedar con mi obra, atesoro obras de otros artistas, tengo obras de artistas contemporáneos, las cuido. Me gustaría tener la posibilidad de mostrar mis obras con obras de otros artistas de la misma época, acompañando”, completó Buda.
 
Calendario Cumelén
 
Hace más de diez años el piso y caminos de la Plaza Cumelén aparecieron pintados de una forma particular, como si la sombra de las farolas quedaran plasmadas sobre el cemento con fecha y hora calculada. Al coincidir las sombras cualquier curioso podía saber la fecha del año, o al menos eso parecía. La técnica y estética de la pintura que emulaba a la sombra denotaban la firma de Buda quien contó en la entrevista que su arte sobre las veredas de la Plaza del Vagón fueron un experimento científico astronómico personal: “en el 2007 estuve para un equinoccio de primavera en el hemisferio norte, en unas pirámides mayas, en la Pirámide del Castillo y vi las sombras en ese momento tan particular. Los Mayas eran mágicos calculando todo, matemáticamente, la sombra que generaba el sol cada día. Volví flasheado y empecé a investigar sobre calendarios. El calendario Gregoriano viene de 1580 cuando los europeos se daban cuenta que el calendario romano estaba mal, se le iban corriendo las estaciones, tenía fallas el calendario. El Papa Gregorio pide que se pongan a estudiar cómo solucionarlo y descubrieron que acumulando la falla en un solo día se podía corregir, entonces ahí empezamos a usar ese calendario con un día más cada cuatro años (...) empecé a ver cómo eran esas fallas, las empecé a ver medidas en postes, bancos de plazas, en objetos sólidos en la plaza. Entonces iba el día 21 de septiembre y pintaba la sombra a las 4 de la tarde. Y al año siguiente pintaba la sombra y el mismo día no caía en el mismo lugar, ahí me di cuenta de que el planeta se movía diferente, no estábamos en el mismo lugar que el año anterior. Pero a los cuatro años comprobé que la sombra sí caía en el mismo lugar y entonces ese día extra acomodaba la falla. Eso también me puso en conexión con la tierra y pintaba grafitis en el piso. Cada marcación era pintar sombras, era cosa del momento, un delirio hermoso. Tenía que ver con preguntas que quería constatar. La pasé bien, iba el mismo día en el mismo horario durante cuatro años a pintar la misma sombra. Logramos una estética que no tenía que ver conmigo sino con el movimiento del cosmos", finalizó el vecino.

"Iba el mismo día en el mismo horario durante cuatro años a pintar la misma sombra"

La nota completa se puede ver en el Canal de Youtube de Castelar Digital y #CASTELARenVivo se repite cada jueves a las 22 en Instagram. El jueves 6 de agosto será el turno del Cristian Taffarello, tanguero, bailarín y organizador de milongas, y de Julián Sánchez y Bruna Estellita, subcampeones argentinos del Mundial de Tango 2019 quienes residen en Tokio, Japón.