Hay diferentes tipos de peelings, y su cosmetóloga seleccionará el que mejor se adecue a las necesidades cosméticas y dermatológicas. Estos son:

•    Químicos
•    Físicos
•    Mecánicos.

Los peelings químicos (con ácidos) deben realizarse en los meses de abril hasta agosto, ya que luego, para nuestra zona geográfica, los rayos solares son más intensos y pueden producir manchas en la piel.

Los peelings físicos se realizan con mascarillas exfoliantes, gránulos de polietileno, entre otros, mientras que los mecánicos se llevan adelante mediante el uso de un cepillo rotatorio o punta de diamante.  Los peelings físicos o mecánicos se pueden realizar durante todo el año.

Según la intensidad de la  acción y el método elegido podrá ser peligroso o no, y por lo tanto un peeling sólo deber ser realizado por médicos dermatólogos, cirujanos plásticos o cosmetólogos,  nunca en forma casera;  ya que su uso inadecuado puede producir irritaciones y quemaduras en la piel. La cantidad de sesiones a realizar depende del mapa cutáneo de cada paciente, pero siempre, se requieren varias sesiones para lograr los resultados deseados.

El peeling se utiliza para: corrección de arrugas finas; piel ajada o marchita; poros dilatados; engrosamiento de la capa córnea. También en afecciones cutáneas tales como cicatrices de acné, varicela, traumatismos; rinofima, discromías, tatuajes, seborrea afluente, quiste de milium y comedones.

Luego de un peeling, la piel queda tersa, con menos arrugas, y de un color rosado, por lo que se aconseja utilizar pantallas solares y evitar la exposición al sol.

Redacción: Cristina Oriola - Cosmetóloga - 11.6852.9332 - www.facebook.com/crisoriola/