Cámaras, luces, producción, maquillaje, vestimenta, vehículos, jaulas, el clima y sus cambios junto con una tropa de amantes del cine lograron materializar Carga Animal, el corto del joven director Iván Bustinduy que competirá en el Palm Springs International Short Festival de California en Estados Unidos. Filmada en 2021 en Chascomús, es una producción de Colectivo Rutemberg y Proyecto Excursus conformada por egresados y estudiantes de distintas universidades de arte y cine (UNA, FUC, ENERC y UBA), muchos de ellos de la Zona Oeste.

El corto, que dura aproximadamente 20 minutos, cuenta la historia de un transportista de animales, interpretado por Héctor Bordoni, que empieza a dudar del origen de su carga ya que el animal que traslada tiene características sorprendentemente humanas. Solo en la ruta comandando su camioneta deberá debatirse entre creer en lo que ve o cumplir con su trabajo.

El festival de Palms Springs es calificador a los Óscars; de resultar ganador de la competencia, Carga animal podrá ser considerado para el siguiente Premio de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas, por lo que la ansiedad, los nervios y las ganas de ganar, están a flor de piel en el quipo que la realizó: “La película es una síntesis de una experiencia vital respecto al cine como espectador y hacedor. Mía y de todo el equipo”, explicó a Castelar Digital el director del film, Iván Bustinduy. “Las películas son un compuesto de trayectorias, no solo es una síntesis de mi experiencia o falta de experiencia, sino de todo el equipo que puso todo”, completó.

#NotaRelacionada: Ánima: una película creada en el oeste llegó al BAFICI

La idea del corto surgió desde la experiencia de un amigo de Bustinduy que siendo transportista siempre se preguntó qué pasaría si en vez de animales fueran personas, si alguien se daría cuenta, si él se daría cuenta. Con ese disparador el equipo creó la película que demandó 6 días de rodaje en ruta atados al clima: “filmamos con tormentas de viento, que no podía salir el sol porque nos arruinaba. En el corto pasa todo en un día y no podía cambiar el clima porque no se filma cronológico, quizás el primer día filmas el final y otras escenas, al otro día seguís y no podía cambiar el clima. ¡Si el último día había sol o llovía, nos moríamos! tenía que estar siempre nublado. Fueron jornadas de filmación de sol a sol, agotadoras”, destacó el vecino. La proyección de la película, su llegada a Estados Unidos es un logro en equipo: “Pudimos mostrar nuestro trabajo, el del equipo técnico y artístico, de la producción. Que se proyecte la película y se vea el trabajo, que no sea en vano. Pasa mucho con cortos que después la película no va a ningún lado, termina siendo un corto en un cajón. Acá, gracias al amigo castelarence Sebastián Álvarez, productor del corto, y al director de fotografía que es de Ituzaingó, Joaquín Castro, logramos llevar adelante la distribución en festivales”.

La llegada de Carga Animal al festival de California no fue al azar. El circuito del cine independiente demanda presentar las producciones a distintos certámenes muchas veces pagando un canon para que sea visto y evaluado. Empero, es tanta la producción a nivel mundial que pocas producciones llegan a los mejores festivales. Palm Springs es uno de los encuentros de cineastas más prestigioso del mundo, nacido en 1995 como un spin off del Festival Internacional de Cine de Palm Springs, este año proyectará 350 cortos de todo el planeta en sólo siete días. Se trata entonces de una vidriera más que emocionante para los productores, es el aval al trabajo, al esfuerzo, al estudio y a la realización de cine independiente.

Carga Animal permite también una interpretación a favor de los derechos de los animales. Si bien el corto es claro en su narración, permite que el espectador piense en analogías con el consumo de animales. Incluso, el actor que está dentro de la jaula durante el filme es Matías Méndez, vegano y activista. “El corto es claro, no es que no entendés qué pasa, no es ambiguo el corto, el tema es la interpretación. Pero lo armamos para que lo complemente el espectador. A mí no me gusta el cine que te baja lo que tenés que pensar sobre un tema: el cine denuncia, panfletario, el cine que tiene todo claro y viene a bajarnos una verdad, a mí no me interesa, se cae mucho en eso. El cine tiene que ser el objetivo, no ser usado para bajar una respuesta que antecede a la película. Lo que puede hacer bien una película es plantearnos preguntas, ponernos incómodos para replantear cómo nos movemos en determinados entornos, pero nunca regalarnos una respuesta digerida. Yo creo el cine no está en posición de bajar línea así, se ha hecho un montón, se hizo bien, se hizo mal. En mi caso, me gusta más abrir preguntas que pronunciar sentencias”, opinó el director de cine.

#NotaRelacionada: Netflix está filmando una serie en la Base Aérea de Morón

 Iván Bustinduy se encuentra actualmente en España pero es oriundo de Castelar. Vive en Tucumán y Tebicuary, estudió en el colegio Abraham Lincoln de Ituzaingó, conocido como el colegio Americano, estudió música con Goyi Alzaibar y comenzó a filmar directamente en la escuela, impulsado por la profesora Ana Medrano. Luego estudio en la Universidad del Cine donde hoy es docente. Además, forma parte del Colectivo Rutemberg, la productora que llevó adelante Carga Animal.

El film se proyectará en el festival de Palm Springs la semana del 20 de junio y su director no podrá estar presente, un video y parte del equipo estará en California para hacerle el aguante al corto filmado con tanto esfuerzo y dedicación. En caso de ganar el festival se garantiza un pase directo a los Óscars.

#NotaRelacionada: Cielitos de Castelar: mirá el documetal de Bartolomé Hidalgo