Gigante, circular e impresionante. El Coliseo es un ícono del imperio que dominó Europa y el Mediterráneo desde Roma. Escenario de batallas espectaculares, de crueldad y demagogias, tiene desde hoy una réplica en el corazón del Conurbano.

Ubicado en Barcala 450, entre Tres Árboles y Treinta y Tres, el Coliseo de Ituzaingó es la más nueva obra de Rubén Díaz, el creador de la Torre Eiffel, la Bondi House, el Arco del Triunfo de Carlitos Balá y la micronación Condado Border, donde se encuentra también Ribbon, la taberna que emula a la de Moes, la más famosa de Springfield, que también lleva su impronta.

Los primeros bocetos del Coliseo de Ituzaingó datan de mediados de 2020 cuando Díaz plasmó en renders sus ideas para un coliseo cervecero: (Ver: Ituzaingó tendrá su propio Coliseo Romano pero cervecero). La pandemia demoró la obra, pero en el último verano el arquetista se puso manos a la obra y comenzó a darle forma: (Ver Conocé por dentro cómo es el Coliseo Romano de Ituzaingó).

Hace apenas unas semanas Rubén Díaz anunció en sus redes sociales la inauguración del Coliseo. (Ver: Rubén Díaz Inaugurará su Coliseo Romano de Ituzaingó). Llegó el día y una multitud se agolpó en las puertas de la nueva obra. Medios de comunicación, amigos, artistas, curiosos y vecinos recorrieron por primera vez al gigante de Barcala.

Un centurión en la puerta le da la bienvenida a los visitantes, las luces y los brillos preparados y hasta un dron evolucionando frente a su fachada. Una multitud espero el horario pactado para que Rubén Díaz abriera su Coliseo. 

Murales y pinturas en cada pared retratan momentos de la antigua Roma intercalados con ovnis y mensajes del artista. En el interior, una puerta oficia de barra donde Oeste Vinos invita a cada curioso con una copa de bonarda. Flashes, selfies, abrazos y festejos. Rubén Díaz, en la planta alta del Coliseo, recibió a cada uno, aceptó felicitaciones y posó para las fotos. 

"Veo que hay tantos locos como yo", comentó el Arquetista a Castelar Digital al ver su obra llena de visitantes. "Nunca pensé que hubiera tantos, siempre pensé que estaba un poco solo, pero toda esta gente tiene también una sana locura. Esto me muestra que voy por el buen camino", completó el vecino. 

La jornada continuó con los visitantes recorriendo el lugar. Más de 300 personas asistieron a la inauguración y muchos más conocerán en los próximos días al nuevo Coliseo Romano de Ituzaingó.