Los colores, la identidad, el folklore de cada partido y los apellidos de los próceres. El barrio, los amigos, la familia y algún amor en la tribuna. La emoción, los nervios, el sufrimiento, la gloria y la alegría sin comparación. La pasión del futbol encierra miles de características que la hacen única. Cuando esa pasión encuentra al club indicado se transforma en fanatismo. El Club Atlético Ituzaingó tiene sus hinchas que saben de pasión, de espera y de gloria.

El Club Atlético Ituzaingó ascendió a la B Metropolitana. Después de 20 años del último ascenso, el León vuelve a competir en la categoría que mejor lo representa. En una noche mágica de sábado con calor, el verde le ganó a Argentino Merlo por penales en el partido de vuelta. En el de ida cayó 2 a 0, por lo que el encuentro de local en el Carlos Sacaan lo obligaba a ganar por más de dos tantos. Se alcanzó esa cifra en el partido y se definió el ascenso por penales. La crónica del partido se puede leer en el siguiente LINK con la firma del vecino Juan José Levrero.

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El ascenso es el objetivo esperado por toda la comunidad de un club. En el caso del CAI la espera fue de 20 años lo que generó más alegría aún al momento de alcanzar el logro: “es una locura, muy merecido. Locura desde el primer minuto. Sabíamos, creíamos y teníamos fe en que se podía dar”, explicó a Castelar Digital Facundo Titunik, Vicepresidente del CAI. Aún con voz ronca producto de la emoción y los festejos, continuó: “se dio de una manera que si la hubiéramos soñado, no pasaba. Podríamos haber ganado 3 a 0, 4 a 0 y festejar, pero llegar al minuto 38 sosteniendo el 0 a 0, revertir ese doloroso 2 a 0 en el minuto 48, una locura!”.

“Este logro es para toda la ciudad, no sólo para el hincha o los jugadores, es para todo Ituzaingó, un ansiado momento. Hace 20 años que no participaba de esta categoría, pasaron muchas comisiones, muchos dirigentes, muchos técnicos, muchos jugadores. Poder conseguirlo en esta gestión es terminar el año con la frutilla del poste. Fue un año lleno de logros: la iluminación del Sacaan, la platea plena después de la pandemia, la ciudad deportiva. Esto es acompañar el crecimiento del club. Nos hacía falta por los jugadores, por el cuerpo técnico y por la gente”, destacó el vecino.

Los goles estuvieron a cargo de Alcides Miranda Moreira y Rodrigo Soria. Los penales que definieron el ascenso fueron los de Alcides Miranda Moreira, Fernando Duré, Matías Caro y Nicolás Lugli.

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“El CAI es mi barrio, mis amigos, mi familia, mi vida, es todo. Nacimos acá, nos criamos acá. No sabríamos a donde ir, no tenemos otro lugar en el mundo que no sea ituzaingó”, dijo un emocionado Titunik. “El club va a necesitar más que nunca de los socios, de todo Ituzaingó para seguir creciendo. La cuota social es lo que nos mantiene a lo largo del tiempo, es lo que hace nuestro día a día. Pero el club ya sabe de esto, de la B, ya conoce la categoría y nos agarra en el mejor momento de la institución. El club ahora está preparado para sostenerse, tiene las bases para hacerlo, tiene el estadio, tiene las condiciones. Para un Nacional B también, porque el estadio es único, las instalaciones, la Ciudad Deportiva que va a tener la segunda cancha de Fútbol Tenis del país. Tenemos todo para acompañar este salto de categoría”, resumió.

La alegría contagia a todo el oeste. El León vuelve a rugir en la B Metropolitana y lo encuentra en su mejor momento. “Siempre le digo a los hinchas: recuerden pelear por lo imposible, porque lo posible se agotó hace tiempo”, finalizó el Vicepresidente del CAI.