¿Mito o realidad? Aseguran que Gardel filmó una película muda en Ituzaingó
Por: Leandro Fernández Vivas.Carlos Gardel es una de las figuras icónicas y representativas de la cultura rioplatense, porteña, de Buenos Aires y Argentina. El cantante de tango, que cada día canta mejor, sigue siendo figura en remeras, carteles y murales. Su historia comenzó a escribirse a principios del siglo pasado, cantando en cafés y restaurantes siendo apenas un joven, para luego transformarse en estrella de cine y de la música.
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De aquella primera etapa de trabajos cinematográficos surge un mito que dice que Gardel filmó en Ituzaingó. El Museo Histórico de Ituzaingó fue fundado por el vecino Rolando Goyaud en 1975 en su propia casa. Allí protegió elementos propios de la memoria colectiva del pueblo de ituzaingó. Con el fallecimiento de Goyaud, su museo fue cedido al Municipio para constituir el Museo Histórico Municipal de Ituzaingó, ubicado en Olazabal 855. Quien subscribe pudo entrevistar a Goyaud hace más de diez años y en aquel momento el vecino historiador confirmó el mito de Gardel en Ituzaingó.
Con apenas 27 años Carlos Gardel participó de la película Flor de Durazno, un largometraje mudo, aún no se había inventado el cine sonoro, dirigido por Francisco Defilippis Novoa, que narra el drama de Rina, una joven que vive en la zona rural de Córdoba, cerca de Dolores, en un rancho serrano. Allí se debate entre el amor de su prometido Fabián, interpretado por un Gardel distinto al típico de sonrisa lateral de las fotos, y el de Miguel, el único joven adinerado de la región. El film se puede encontrar en Youtube pero en una versión re editada en la década del 40 en la que se le añadió sonido y algunas imágenes que acompañan las canciones de Gardel que no estaban en la versión original.
“La primera película de Gardel se filmó en Ituzaingó en una pulpería, te hablo de una película muda con un Gardel con 130 kilos, Flor de Durazno se llamó”, contó Goyaud en 2009, y completó, “¿Sabés quien estuvo pescando y comiendo asado en la década del 20 en Ituzaingó? Carlitos Chaplín. Fue en una quinta de Villa Udaondo que tenía hasta pejerreyes”, sobre otro de los mitos del oeste.
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La película Flor de Durazno dura poco menos de una hora en su versión de la década del 40. En la trama no se nombra a Ituzaingó en ningún momento aunque se vislumbran pulperías como las típicas que habitaban la región rural de la provincia de Buenos Aires. Se cree que el nombre original de Ituzaingó, Santa Rosa, se debe a una pulpería que era atendida por una señora de nombre Rosa que habría estado ubicada en las intersecciones de las actuales Blas Parera y Rivadavia pero del lado de Castelar. La avenida Santa Rosa, frontera entre Morón e Ituzaingó, lleva este nombre en honor a aquella pulpería. En la película además se nombra a la ciudad de Dolores, a Capilla del Monte y la populosa Buenos Aires. En rápidos fotogramas en blanco y negro y con muy poca definición, no se logra identificar a ningún escenario con el perfil llano de Ituzaingó.
Consultado por Castelar Digital, el Director del Museo Histórico Municipal de Ituzaingó, Licenciado Facundo Valdez, explicó que las dos afirmaciones aún se mantienen dentro de la incógnita. No hay documentación que certifique que tanto Carlos Gardel como Carlos Chaplín hayan estado en Ituzaingó, aunque tampoco hay fuentes que lo desmientan. Las fotos que Goyaud tenía en su museo no están certificadas y están solamente acompañadas por el mito, el rumor y el comentario que afirma que Gardel filmó en Ituzaingó. Será cuestión de seguir investigando o también de creer que el zorzal criollo cantó y se lució ante las cámaras hace más de cien años y tan cerca de casa.
Leandro Fernández Vivas
Periodista
Técnico Universitario en Periodismo.
Director Periodístico en Castelar Digital.
Socio Fundador de Ocho Ojos.