Pequeño en tamaño pero inmenso en belleza, el colibrí es una de las aves más simpáticas que se puede encontrar en la zona oeste. Empero, cada vez se lo ve menos en patios o jardines y su ausencia responde a que no siempre se siente cómodo con las plantas que lo rodean. Exóticas y extrañas, mucha de la vegetación ornamental de los hogares no lo atraen ni lo alimentan, entonces no aparece.

Así como con el diminuto pájaro ocurre con las mariposas y otros animales asociados a la flora autóctona. La solución es llenar los hogares con aquellas plantas, flores y frutos que la fauna local conoce y necesita. Cipó Paisajes comenzó su actividad hace seis años y, radicado en San Antonio de Padua, brinda sus servicios a toda la región. Se especializa en el diseño de paisajes en jardines privados o bien en espacios verdes de fábricas, industrias y hasta edificios destinados a oficinas. Muros verdes, jardín vivo y mucho más.

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Rocío y Julieta Gómez estudiaron la Licenciatura en Diseño de Paisajes en la Universidad del Museo Social Argentino y tienen un objetivo clave, “ser el intermediario entre el ser humano y la naturaleza, a partir de la creación de espacios verdes que sean sostenibles, funcionales, ornamentales y albergue de biodiversidad local asociada”, explicaron a Castelar Digital. “Nuestro trabajo lo hacemos como una respuesta a la problemática actual de extinción masiva de especies, por eso tenemos el enfoque muy pronunciado en lo que es especies nativas”, completaron.

La Reserva Ecológica de Costanera Norte, como la Reserva Natural Urbana de Morón, o incluso la Reserva Natural de Otamendi, el Parque Nacional más cercano a la zona oeste del conurbano, tienen como objetivo la protección de la flora y fauna autóctona, plantas y animales naturales de la región. Cipó propone transformar cada patio, balcón o jardín en una reserva personal ya que al utilizar flora vernácula se consigue también la fauna del lugar: “Nuestro slogan es Paisajes Vivos por eso, porque no es sólo el diseño y la vegetación elegida. Muchas veces vemos especies exóticas muy bonitas a la vista pero no son atrayentes de fauna, entonces no hay mariposas ni colibríes, ni cualquier otro tipo de insecto local. Habitualmente en los jardines es muy típico que encuentres agapanto o tejo. Tambien hay otras especies que hay exóticas y nativas, como los penicetus, hay especies nativas y otras exóticas. En las nativas usamos penicetus villosum que lo combinamos con otras especies de nativas como la verbena, la salvia, salvia guaranítica, chilca mariposera que son atrayentes de mariposas y otras que son hospederas. Con eso se genera una biodiversidad distinta, que también revaloriza la biota rioplatense”, señalaron las vecinas.

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Estrés y colibríes
Desde una planta de interior o macetas cerca de la oficina, hasta parques o jardines pensados y diseñados para ser un espacio de breve esparcimiento o encuentro, el diseño de paisaje influye también en el desempeño laboral. En tiempos de home office, videoconferencias y trabajo virtual, el contacto con la naturaleza es un escape necesario: “el paisaje influye bastante en el desempeño laboral, hay estudios que muestran que el hecho de tener espacios verdes cerca, no solo que relaja y des estresa un montón, sino que baja en un margen elevado el índice de padecer ACV o enfermedades relacionadas con el sistema nervioso. Tener una planta de interior o el patio diseñado con un paisaje ayuda. La persona que solo cuenta con un espacio interno, chico, y no puede tener un balcón o terraza, conviene incorporar plantas de interior. Pero si la persona puede tener un espacio, o un patio interno, si tiene todo cemento, incorporar un buen diseño o especies ayudaría muchísimo. Con solo tener plantas aumenta la purificación del aire y también mejora el ambiente laboral en empresas y aumenta el rendimiento laboral de los empleados. Se des estresan, rinden más. El solo hecho de tomarte diez minutos para ir a caminar al patio, despejar la mente, lo que no podías resolver cuando volvés lo sacas enseguida”, explicaron.

Jardines verticales, techo verde, decks o jardín de mariposas, paisajes que pueden ser parte de  una empresa o un hogar con el mismo objetivo. Pero entre los servicios que ofrece Cipó Paisajes destaca uno por su belleza especial, con alas que se baten tan rápido que cuesta verlas. El jardín de colibríes está especialmente diseñado en su flora para atraer y ser sustento de picaflores. “Se hace una estructura de jardín en la cual se hacen combinaciones de especies que atraigan al colibrí. Se usan mucho de especies de labiadas. El colibrí muy territorial y en su comportamiento evolutivo, a diferencia de otra especies se especializa en recordar la flor que libó, si vuelve a la planta no gasta energía buscando. Y son muy territoriales porque se pelean entre sí por una planta. Hemos visto en algunos jardines, la lucha, son terribles”, contaron.

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Entre las plantas que no deben faltar en el jardín para que se acerquen colibríes la que mayor éxito ha alcanzado es la salvia guaranítica, aunque ayudan también las salvias celestes y toda especie nativa. La mirada ecológica, el diseño al servicio de la biodiversidad, son características que destacan a Cipó Paisajes. La naturaleza nativa está presente en sus jardines. Incluso hasta su nombre está en la misma línea: “Cipó es por una enredadera nativa que se llama globito Cipó. La Cardiospermum grandiflorum, el nombre vulgar es globito cipó, la elegimos porque coincide con nuestro, trabajo, nuestro mensaje, es coherente con nosotras”, finalizaron las licenciadas Rocío y Julieta Gómez.