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Sociedad
4 Mar 2021

Curiosa historia conecta la primera camiseta de Matreros con la Casona Gotter

Por: Leandro Fernández Vivas.
El club de rugby nació promediando la primera mitad del Siglo XX y las camisetas se pagaron con un crédito a nombre del primer presidente, pero sus colores y diseño estuvieron casi atados al azar.
En 1928 Morón era muy distinto a como se lo ve hoy, con mayoría de calles de tierra y pocas casas con energía eléctrica, las actividades sociales se resumían a escenarios como la plaza principal, en aquel entonces Plaza Alsina, el andén de la estación y las sociedades de inmigrantes europeos. De aquellos espacios sociales surgieron también las primeras prácticas deportivas, los primeros equipos y encuentros clásicos.

El Rugby Club Los Matreros es una institución histórica e icónica en el oeste del conurbano. Con casi cien años de historia es reconocido en su deporte en todo el país y miles de vecinos de Morón, Ituzaingó, Castelar y ciudades vecinas integraron sus equipos. Identificado con el rojo y blanco en grandes cuadrados en su camiseta, no siempre el esquema fue igual y la elección de los colores fue casi al azar.

Entre los primeros vecinos que dedicaron su tiempo al rugby surgieron dos equipos, uno se sumó a las actividades del Club Porteño de Morón y el otro se transformó en su clásico rival. Entre los vecinos y familiares hubo casos de hermanos en distintos equipos o familias que alentaban por los dos. El segundo equipo debutó en el primer encuentro bajo el nombre de All Boys. El 9 de julio de 1928, como parte de los festejos patrios, se dió el primer encuentro que terminó empatado 3 a 3. El partido revancha se programó para el 16 de septiembre de 1928 a las 15 de la tarde, según información brindada desde el Los Matreros por el vecino Sebastián Bertelli, referente de la institución y encargado del área histórica del club. Para este segundo partido el club ya tenía otro nombre, otros colores y una comisión directiva que trabajaba en pos del crecimiento de la agrupación.

El 28 de agosto previo, los All Boys se reunieron en un galpón de la calle Salta, propiedad del vecino José De Paoli. Cuando se trató de bautizar a la naciente institución se barajaron tres nombres: Los Caranchos, Alpatacal y Los Matreros. El último consiguió la mayoría de los votos y dio inicio al club de Morón. En esa misma fecha se eligieron autoridades, se firmó el estatuto y se habló de un crédito en la famosa tienda Gath & Chávez para la compra de los uniformes.

Gotter y Matreros
En 2014 Castelar Digital entrevistó a la vecina de Morón Marta Gonzalez Po quién narró sus vivencias, la historia de su familia y, con ella, de gran parte de Morón y del oeste. En la nota La historia de una familia puede ser la historia de una Ciudad se narra parte de la génesis de Morón, desde la llegada de los ancestros de la entrevistada a fines del Siglo XIX hasta la segunda mitad del Siglo XX. Apellidos como Pardo, Po, González y Gotter se entrelazan dándole forma a varias historias. En esta nota también se relata la historia de Narciso Gotter y la casona de Carlos Casares y Sarmiento, recordada por su tamaño, esplendor y belleza. Un valor arquitectónico de la zona perdido hace varias décadas.

 “Mi mamá eligió los colores de Matreros”, recordó Martha en aquella nota. Martha reconstruyó su árbol genealógico: su papá fue José González Po y su mamá se llamó María Gotter, la hermana de Narciso Gotter quien construyó y habitó el chalet de Castelar Norte. “Mi mamá trabajaba en Gath & Chaves y tenía descuentos para comprar ropa. Le dieron el dinero y aprovechó una oferta. Era un conjunto de ropa hecho para otro equipo que nunca lo retiró. Se trajo el equipo, la camiseta era de cuadraditos rojos y blancos, pero chiquitos, no grandes como los de ahora”, completó.

Según la información brindada por Bertelli, aquella compra en Gath & Chavez se consiguió por medio de un crédito a nombre de Juan Carlos Salinas, el primer presidente de Los Matreros, aunque entonces la elección de la oferta estuvo a cargo de María Gotter.

Los dos equipos se encontraron cara a cara en la fecha pactada, pero la suerte no estuvo del lado del nuevo club que cayó por 9 a 0 frente a Porteño. Pero lo importante de la jornada no fue el resultado, ese día se vio por primera vez en la cancha la camiseta roja y blanca del Rugby Club Los Matreros.  
Arriba, Los Matreros en 1928. Debajo, en 2018.
Arriba, Los Matreros en 1928. Debajo, en 2018.

Agradecimiento especial a Sergio Doval y Sebastián Bertelli por brindar desde el club la información que compone esta nota.
Leandro Fernández Vivas

Leandro Fernández Vivas

Periodista

Técnico Universitario en Periodismo.
Director Periodístico en Castelar Digital.
Socio Fundador de Ocho Ojos.

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