La técnica es simple pero requiere una precisión y experiencia que es difícil de encontrar. La mano derecha acelera mientras un pie frena la rueda, la competencia entre las dos fuerzas lo mantiene en el aire y hace “caminar a la moto” asegura Maxi Tsabazis. El wheelie siempre llama la atención pero es sólo uno de los muchos trucos que hace el vecino de Merlo con su moto. Pionero del deporte Stunt en Argentina y record nacional ahora va por más y quiere alcanzar el Record Guinness recorriendo cien kilómetros haciendo ‘caballito’ sin la rueda delantera.

Maxi vive en Libertad, partido de Merlo. Toda su vida estuvo ligado a distintos deportes pero en 2009 encontró el que lo identifica y transformó su vida. El Stunt es más que una demostración de habilidad y virtud sobre una moto. Los saltos, giros, wheelies con manos, con una sola, sin manos o sentado en el manubrio, demandan práctica, entrenamiento, concentración y control de la adrenalina. El vecino es pionero del deporte en argentina y el año pasado alcanzó el record nacional de wheelie al recorrer 24 kilómetros sosteniendo su moto sobre una sola rueda. Ahora va por más.

“Fue un desafío porque pensé que no lo iba a poder hacer”

“Quiero hacer cien kilómetros y sin la rueda de adelante”, explicó a Castelar Digital sobre el que puede ser el wheelie más extenso del mundo. “Los 24 kilómetros del año pasado fueron la prueba, pero lo hicimos con la rueda de adelante. Estuvo muy bueno. Fue un desafío porque pensé que no lo iba a poder hacer. Se hizo, tranquilo, costó bastante. Ahora queremos ir por el record Guinness”, completó.

Conocido en el mundo de las exposiciones de autos, de los festivales de motos y shows fierreros, recorrió todo el país presentando su espectáculo de piruetas y malabares en dos ruedas. Show que puedo disparar los nervios del público y termina cubriendo parte de la pista-escenario con olor a cubierta quemada. Su habilidad y tenacidad sobre su moto lo presentaron como pionero y también le otorgaron el record nacional: “los 24 kilómetros se hicieron desde González Catán hasta Mariano Acosta, en parte de lo que será una nueva autopista. Fui y volví a una velocidad de 60 kilómetros por hora y me demandó media hora. Lo hicimos muy bien, con moto de seguimiento, cuatro chatas que iban cubriendo la prueba. La moto se preparó exclusivamente para esa actividad: se alivianó, se le colocó un arnés en el manubrio que me sostenía desde el pecho y se le colocó una almohadilla para no resbalarme”.

“Los 100 serían en Acceso Oeste, desde Morón hasta San Andrés de Giles”

Los 100 kilómetros son cuatro veces la prueba realizada en diciembre y necesitará trabajos adicionales en la moto para que sea más segura y contar con todos los permisos ya que atravesaría varios municipios y concesiones viales: “los 100 serían en Acceso Oeste, desde Morón hasta San Andrés de Giles. Tenemos programado lo que vamos a hacer. Al hacerlo sin la rueda de adelan lo hace peligroso. No existe un record Guinness sin rueda delantera y vamos por ese. Pero entonces necesitamos diseñar un arnés distinto, que yo no esté atado a la moto, para que si se apaga yo pueda salir de la moto, no quedar atado”, explicó.

La compañera de la aventura es una moto RVM 250 Inyección a la que se le adaptó el caño de escape para que genere más torque y se la preparó para las exigencias de este deporte. No obstante, quizás los 100 kilómetros haciendo wheelie sean para otra nueva moto, pero de la misma marca, que aún no se vende en el país y se aprovecharía el evento para realizar su lanzamiento en el mercado argentino. El piloto asegura que el apoyo brindado por los sponsors y auspiciantes es lo que le permite continuar con su actividad, desde Wander lubricantes a Manjar de Pollo, pasando por Genesis Moto, Nueve Ocho Tres, Metalúrgica Jaime, Mecánica Carlitos y la propia RVM. “Si lo logro quiero nombrar y agradecer a todos, a cada uno que me dio la mano, a quienes me dieron difusión y a quienes me ayudaron”.

“El stunt es una adicción. Cuando haces un truco querés hacer otro más”

Aun no hay fecha para la prueba. Aunque está programada para diciembre de este año, depende de la fecha en que Guinness envíe un veedor oficial que certifique el logro. Mientras Maxi Tsabazis sigue entrenando y demostrando sobre la moto la pasión que lo mueve a hacer wheelies, raudos giros y peligrosos saltos: “Hice mucho deporte en mi vida, este es el único con el que no me aburrí. El stunt es una adicción. Cuando haces un truco querés hacer otro más… No me aburro de hacerlo, te alegra la vida, te cambia todo, te da otra cosa”, finalizó el vecino.